Cuando nos cambiamos de casa, apartamento o incluso de oficina, queremos relajarnos y pensar en los próximos pasos a dar. Uno de ellos será elegir la decoración de las cortinas. Estas son muy importantes, porque se encuentran en casi toda la casa; desde la sala, el comedor y el cuarto de los niños.
En este momento surge la pregunta clave ¿cuál son las cortinas adecuadas en cada espacio? Para averiguarlo, debemos iniciar con la búsqueda, buscar consejos, evaluar toda la información que llegará y decidirnos por el modelo que mejor se acople a nuestras necesidades y gustos. En el siguiente texto te daremos unos consejos para que ese proceso sea mucho más sencillo.
Conocer el tipo de ventana que decoraremos es supremamente importante, y es uno de los factores que más debemos tener en cuenta a la hora de elegir una cortina. Para ello, te recomendamos que mantengas las proporciones entre la cantidad de tela que vayas a utilizar y lo largo de la ventana. Piensa, eso sí, cuánto sol y claridad entrará. En este momento surgirá otra pregunta clave, ¿necesitarás cortinas tupidas o transparentes? Todo depende del entorno donde las vayas a instalar.
Siempre debes tener una calculadora en la mano para realizar las cuentas de los metros de tela que necesitas para cada cortina. A esto añádele unos 30 centímetros de ancho de la ventana y luego multiplica el resultado por 2,5 o 3 cm. Aunque esto dependerá de cuánto quieres que la cortina frunces.
En cuestión de largo existen muchas clases de tendencias. Lo más habitual es agregar 15 cm a lo largo de la ventana. No obstante, muchas personas prefieren cortinas que se arrastres, por lo tanto deberás añadir 10 cm o más, de esa manera alcanzarán a apoyarse en el suelo. De hecho esta es una de las tendencias principales en esta época del año, así que aprovéchala.
Para que tu cortina tenga una excelente caída, lo mejor es que te decantes por telas pesadas, cómo los linos gruesos, las sedas salvajes o las chenillas. Si quieres usar telas frescas, elige lonetas, arpilleras de algodón o linos de seda. La segunda opción es perfecta para los lugares frescos en los que entra el viento de la tarde y refresca el ambiente.
Si, por ejemplo, la ventana no permite grandes cortinajes y quieres una solución mucho más práctica y ligera, debes decantarte por los estores, estos se convertirán en tus mejores aliados. Los puedes poner plegables, los cuales vienen con varillas, paqueto que no utilizan varillas o romas que usan drapeado. Esto ayudará a potenciar la rusticidad de todos los lugares donde los instales.
Para ganar luz natural te recomendamos utilizar tela de visillo en la confección de tu cortina. Este tipo de tejidos serán vaporosos y ligeros, tanto hilo, voile, lino de trama abierta, serán perfectos para dejar pasar toda la luz del sol.
Esta entrada ha sido publicada el 30/09/2020 11:00
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